¿Cuáles son los cuidados de la Euphorbia Lactea Cristata?
A la Euphorbia Lactea Cristata le gusta el clima cálido. Es una planta que se adapta muy bien a los climas calurosos, por lo que bastará con que la protejas del frío en invierno para verla feliz. Por eso es mejor tenerla como planta de interior.
Sol directo. Necesita muchísima iluminación durante todas las estaciones del año.
Regar moderadamente ya que resisten muy bien la sequía a razón de una vez cada 10 días en verano. Conviene esperar a que se haya secado la tierra por completo. En invierno suspender los riegos si se cultiva en exterior y regar una vez al mes, como mucho, en interiores.
El único peligro grave para estas plantas es el exceso de riego que provoca pudrición de tejidos. Así que, si eres de regar poco, o te olvidas de hacerlo, esta variedad te irá como anillo al dedo.
El sustrato deberá ser muy drenante: humus, arcilla fina y arena de grano grueso. En La Plantisserie ofrecemos sustratos personalizados para cada planta.
Barro.
Otras peculiaridades de la Euphorbia Lactea Cristata
Hojas
Su segundo nombre, Cristata, hace referencia a la forma de cresta que tiene y a sus ramas onduladas, muy peculiares. La encontrarás en una variedad de colores que van del blanco al amarillo, pasando por el verde, el violeta y el rosa.
Sus hojas presentan unas espinas cortas e inofensivas.
Origen de la Euphorbia Lactea Cristata
La Euphorbia lactea cristata es una variedad de la Euphorbia lactea. Pertenece a la familia de suculentas Euphorbiaceae y es originaria de Asia, sobre todo de zonas tropicales de India.
También se la conoce bajo los nombres más populares como, Planta crestada, Planta candelabro crestada, Euphorbia cristata o Euphorbia crestada.